San Juan, Puerto Rico.- Una vez más, Romeo Santos demostró ser “el Rey de la Bachata” al derrochar puro romanticismo en la primera de dos funciones de su espectáculo The King Stays King anoche en el Coliseo de Puerto Rico, en San Juan.
Desde una silla de rey dorada y roja, simulando un trono, apareció el cantante, deleitando a sus fieles seguidores que se rindieron ante él con el tema You, a eso de las 9:45 de la noche. El artista se lució mostrando su habilidad en la guitarra.
Con tan solo decir “¡Puerto Rico!”, Romeo provocó los gritos ensordecedores que abarrotaban el recinto. Ataviado con un jacket rojo, camisa blanca y pantalón negro, encendió el ambiente al entonar La diabla y Malevo, mientras sostenía un micrófono dorado que en la parte baja tenía una corona con piedras, como los cetros de la realeza medieval.
Como una fanática trataba de tocarlo, el artista, desde la tarima, le dijo al personal de seguridad: “¡Hey, déjala, ella es salvaje y yo también!”. Coqueto, Romeo también le respondió a la chica: “I love you, too”. Al parecer, ella no lo entendió, por lo que él agregó: “¡Que te amo también, coñ...!”. El gentío avaló su comentario con un mar de risas.
“¡Buenas noches, Puerto Rico! Si alguien quiere opinar, decirles cómo tienen que vivir su vida, nadie tiene derecho a opinar”, dijo el intérprete antes de cantar el número Que se mueran. No cabe duda de que el ex líder de la agrupación Aventura es pícaro y le gusta provocar a sus fanáticas. En todo momento se mantuvo interactuando con ellas y lanzándoles besos.
“¿Dónde está la República Dominicana esta noche? ¿Dónde están los boricuas?... Esta noche de los enamorados es de las mujeres. ¿Dónde están mis mujeres boricuas? ¿Dónde están las mujeres solteras y las sexis?”, inquirió el anfitrión de la noche de San Valentín, logrando la euforia de los espectadores, quienes se mantuvieron enérgicos al corear y bailar al ritmo de las canciones.
Es de ellos también
Pero no se podía olvidar de sus muchachos. El show tomó otro giro durante media hora cuando el cantautor invitó a un duelo musical a varios admiradores del público para entonar el tema Debate de cuatro. Más de cinco hombres subieron al escenario, tres fueron escogidos y uno aprovechó la ocasión para dirigirse a su esposa, que se encontraba en el mar de gente que llenó el Choliseo.
Esta parte divirtió a la concurrencia, que rió, cantó y, cuando los chicos desentonaban, les gritó: “¡Y... fuera!”.
El ganador resultó ser Juan, pero el artista lo bautizó como “Juanqui”, quien cargó con $1,000, de los que le regaló $100 a la persona de seguridad que le permitió subir a la platea.
Romeo le concedió a Juanqui 18 segundos para expresar unas palabras. “Puerto Rico está jod..., tenemos que hacer las cosas bien y hay que tener a Dios en el corazón. Tú puedes jod..., pero hay que tener a Dios en el corazón”, dijo el joven antes de darle un beso a Romeo por la emoción.
Aparece Wisin en tarima
Con otro cambio de ropa, luciendo camisa crema y pantalón blanco, el solista interpretó a las 11:08 de la noche el tema número 12 de su repertorio, Llévame contigo, de su disco Fórmula Vol.1, en uno de los momentos más emocionantes.
Luego, el Choliseo retumbó con el sabor y ritmo pegajoso de Wisin, del dúo Wisin & Yandel, que se le unió en el tema Noche de sexo.
El área de arena seguía siendo una pista de baile donde varias parejas sacudieron sus cuerpos al son de la pegajosa bachata de Romeo.
El cantante de madre puertorriqueña y padre dominicano culminaría su recital con la canción Promise, que interpreta con el artista estadounidense de R&B Usher.
Fuente: primerahora.com