Apenas unas horas después de que Nicolas Sarkozy perdiera las elecciones presidenciales en Francia, la portavoz de Carla Bruni, Veronique Rampazzo, indicaba al diario Le Parisien que la exprimera dama gala estaba preparando una serie de conciertos y nuevo disco.
"Carla no interrumpió su carrera musical durante los cinco años que ha durado el mandato de su marido, Nicolas Sarkozy. Ella ha seguido componiendo", ha explicado Rampazzo, respondiendo a aquellas voces que hablan de "regreso" de Bruni a la canción.
Al parecer, el nuevo álbum de la cantante y modelo salga al mercado el próximo otoño, antes de Navidades.
La carrera discográfica de Bruni ha tenido una trayectoria irregular.
Su último y tercer disco, Comme si de rien n'etait, que fue lanzado cuando la italo-francesa ya era primera dama, obtuvo unas ventas más que modestas pese a la expectación que había generado. Lejos quedaron las lustrosas cifras que obtuvo en 2002 con su primer álbum, Quelqu'un m'a dit, del que vendió 1,2 millones de copias en Francia y 800.000 en el extranjero.
Su segundo trabajo, No promises, que vio la luz en 2007, no tuvo el mismo éxito y solo vendió 80.000 copias.
Carla Bruni ya anunció en 2011 que retrasaría el estreno de su cuarto disco para después del verano de 2012. Los medios interpretaron esta decisión de la cantautora como un intento de que su carrera no interfiriera en la de su marido y en los comicios presidenciales.