La cantante de origen latino Jennifer López (42) se encuentra muy ocupada buscando talentos por América Latina. Tras su paso, entre otros países, por Uruguay, Argentina y Perú, la Diva del Bronx se encuentra simultáneamente trabajando con su ex marido, el salsero Marc Anthony (43), para acelerar lo máximo posible los trámites de divorcio.
Ambos artistas desean, desde luego, resultar favorecidos durante la división de bienes, sin embargo están dispuestos a llegar a un acuerdo justo para poder presentar la demanda de divorcio oficial en las próximas semanas.
Según los acuerdos que había realizado la mediática ex pareja cuando anunció su separación, sus abogados respectivos contaban con seis meses para separar en forma armoniosa el sinfín de negocios y bienes con los que cuentan. Asimismo, debían decidir cómo quedarán las relaciones de ambos con los pequeños Emme y Max (3) tras el divorcio consumado. Ahora esperan poder tener los trámites listos durante el próximo medio año.
"Jennifer y Marc tienen muchas cosas en común: casas, negocios y son propietarios minoritarios del equipo de futbol americano Miami Dolphins. Es complicado, y su separación podría llevar meses antes de que puedan lograr los términos de un acuerdo legal", comentó un allegado a Jennifer y Marc.